jueves

y me iré, para no verme más...


Cuando era chica y llegaba la noche, el momento de apoyar la cabeza sobre la almohada, lo único que hacia era llorar y el deseo infinito de desaparecer de la faz de la tierra, por lo que me pasaba, crecí pensando que eso que me pasaba era normal, común, corriente. El tiempo pasó y crecí. Y eso que me sucedía no era normal, yo quería (quiero) desaparecer totalmente a recordar esas cosas. Me preguntaba y me pregunto ¿porque a mi? ¿Por qué? Con los años eso dejo de sucederme y esto para mi nunca existió, siempre estuvo en mi cabeza, pero nunca existió. Un día hablando con Luisina, una amiga mía de la Web, le dije que tenía que hacer un trabajo sobre anorexia y le pregunte a ella si le podía hacer una entrevista, ya que ella tiene esa enfermedad. Me dijo que si y además me paso un archivo donde ya había una entrevista que le habían hecho hace bastante tiempo, en todo esa extensa entrevista que no hablaba solamente de la enfermedad hablaba de su vida en general, leí lo que me había pasado a mi también y las imágenes y recuerdos que me atormentan desde chica reaparecieron en mi cabeza. Pasaron unos días hasta que una noche de insomnio…

-: Dormís?
-: No ¿que paso?
-: Nada, viste la entrevista que me pasaste.
-: Si, que tiene?
-: tenemos algo en común, eso…
-: Desde que edad?
-: 7/8 años
-: Que pedaso de hijo de puta.
-: Es la primera vez que lo hablo, siempre quise desaparecer, siempre de chica lloraba mucho.
-: Son mierdas que pasan.





Siempre me pregunto como seria mi personalidad si no hubiera pasado lo que paso, odio estos recuerdos e imagenes que vienen cada tanto y terminan en una crisis de llanto.