viernes

Simplicidad de la felicidad ~

Durante Bariloche mi relación con K fue muy buena como si todo lo que había pasado semanas antes de viajar nunca hubiera sucedido. Una noche en By Pass mientras sonaba “un amigo es una luz” nos abrazamos y comenzamos a llorar como si esas lágrimas borrarían el daño que nos provocamos mutuamente, al oído me dijo “perdón” el cual yo conteste “y vos a mi”, continuamos abrazadas.
No se hablo absolutamente nada, todo quedo en ese abrazo, en esas lágrimas y en esos “perdón” que nos dijimos.

Respecto hombres JA, creo que Bariloche fue la excusa perfecta para “descontrolar”, lo que hace tanto tiempo no hacia acá en Buenos Aires y no digo que sea la virgen María pero mis últimos findes acá se basaron en películas con brownies.
Estuve con algunos, éramos 60 en total, imposible que no pase nada con ninguno, pero Miguel, conocido como este personaje, fue el mas “importante” estuve los 3 primeros días con el, me encantaba, tenia y tiene todo lo que me gusta de un chico, había un mínimo detalle, Miguel tenia novia.
En el medio de la semana tuve un problema con sus amigas y por ende termino el viaje y se fue sin despedirse. Las amigas de Miguel eran esas chicas que iban y le ponían el culo en la cara al coordinador, eran esas que se ponían pantalones ajustados y remeras que eran trapos que solo le tapaban algunas partes, pero bueno en Bariloche las chicas que calientan al coordinador nunca faltan.

Dentro de otras cosas que pasó en Bariloche fue reconocer a Luchita, fui arreglarme el pelo al baño y ahí estaba ella con un grupito de chicas, la reconocí por sus ojos. Amo tener memoria visual.

También me encontré con mis amigas de mi primer secundaria, en el momento que me las encontré mi corazón se lleno de felicidad, estábamos bailando en Bariloche, algo mas?

Roberto, mi coordinador, típico chico hermoso de 24 años. En ese tema la empresa es bastante seria, no le permiten a los coordinadores que pase nada con los egresados. Si hubo muchos abrazos que decían “no podes ser tan lindo” pero no paso a mayores.
Natalia, mi otra coordinadora, ella era mas anti-fiesta, excepto los últimos días estaba mas tranquila nos dejaba hacer mas cosas.
Y por ultimo estaba Maxi, coordinador general, no estaba siempre con nosotros pero si pasamos muchos momentos con el, el era diferente, mas que hermoso físicamente, tenia una belleza interna increíble, me mostró su punto de vista de la vida, y de lo simple que es, ser feliz.

Brindemos por la simplicidad de la felicidad, dijo la última noche.